¿Celebración o Lucha? Resignificando el Día Internacional de la Mujer en La Guajira

 

El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se ha convertido en una fecha emblemática para conmemorar las luchas y logros de las mujeres a lo largo de la historia. Sin embargo, en el departamento de La Guajira, Colombia, esta fecha adquiere un significado aún más profundo y urgente frente a la alarmante realidad de los feminicidios que azotan la región. Estamos frente a una ¿Celebración vacía o lucha permanente? Resignifiquemos el 8M en La Guajira para cerrar las brechas de desigualdad. Empoderar a las mujeres, esa la mejor solución ante las crisis.

La Cruda Realidad de los Feminicidios en La Guajira

Según datos del Observatorio Colombiano de Feminicidios, en 2023 se registraron 511 feminicidios en el país, más de uno por día, La Guajira no escapa a esta trágica tendencia. En 2021, las autoridades lograron esclarecer apenas cuatro casos de feminicidios en el departamento, lo que evidencia la magnitud del problema y la impunidad que lo rodea.

Detrás de cada cifra hay una mujer, una vida truncada por la violencia machista. Mujeres que en su mayoría tenían entre 20 y 39 años, con sueños, proyectos y familias que las lloran. Esta realidad nos obliga a cuestionar el verdadero sentido del Día Internacional de la Mujer en La Guajira. ¿Es momento de celebrar o de intensificar la lucha?

La Respuesta Insuficiente del Gobierno

Ante esta crisis, la respuesta del gobierno departamental y los municipios ha sido insuficiente y poco efectiva. Si bien se han implementado algunas medidas como el monitoreo permanente de casos de violencia de género por parte del Consejo de Seguridad Nacional, estas acciones no han logrado frenar la ola de feminicidios.

La falta de recursos, la debilidad institucional y la ausencia de políticas integrales de prevención y atención a las víctimas, son algunos de los factores que explican la ineficacia de la respuesta estatal. Mientras tanto, las mujeres guajiras siguen expuestas a la violencia y el miedo.

A pesar de ello, durante nuestro paso en la Asamblea Departamental de La Guajira avanzamos en logros significativos en el cumplimiento de una agenda de género, sacando adelante iniciativas que hoy son ordenanzas departamentales y que más allá de ser acciones afirmativas, se convierten en verdaderas herramientas legales para que el gobierno y la ciudadanía puedan continuar en la senda de la construcción de una verdadera política pública. Dentro de estas iniciativas se encuentra: La creación de la Medalla Dama Guajira que exalta los logros de mujeres en diferentes campos, la creación de la Comisión Legal Para La Equidad De La Mujer en la Asamblea Departamental,  y la ordenanza que estableció con carácter obligatorio la transversalidad de género en el departamento de La Guajira como un instrumento para alcanzar la equidad social y como una categoría de análisis para los efectos en la aplicación de la políticas, programas y  proyectos en favor de hombres y mujeres de nuestra región. 

Sin embargo, el gobierno departamental quedó en deuda con las Mujeres de La Guajira ya que no cumplió con lo comprometido en el Plan de Desarrollo Departamental “Unidos Por el Cambio” 2020  -  2023 en cuanto a los Diseños, formulación e implementación de la política pública de la mujer y género. Esperamos que este nuevo gobierno lo priorice y lo haga realidad, se requieren decisiones planificadas y ajustadas a las demandas de la mujer en el territorio.

Un Llamado Urgente a la Acción

En este contexto, el Día Internacional de la Mujer en La Guajira debe ser un llamado urgente a la acción. Más allá de los discursos y los actos simbólicos, se requiere un compromiso real y sostenido por parte de las autoridades y la sociedad en su conjunto para enfrentar la violencia feminicida.

Es imperativo que el gobierno departamental y los municipales asignen los recursos necesarios para formular e implementar la Política Pública de la Mujer y la Equidad de género, y fortalecer las instituciones encargadas de prevenir, investigar y sancionar los feminicidios. Esto incluye capacitar adecuadamente a los funcionarios, mejorar los protocolos de atención a víctimas y garantizar el acceso efectivo a la justicia. Nos encontramos en el momento oportuno, pues transitamos el proceso de formulación de planes de desarrollo, y es ahí donde se debe incluir, planificar y financiar esta apuesta.

Pero la responsabilidad no recae únicamente en el Estado. La sociedad guajira debe movilizarse y alzar su voz para exigir acciones concretas. Las organizaciones de mujeres, los colectivos feministas, la academia y los medios de comunicación tienen un rol fundamental en visibilizar esta problemática y presionar por cambios reales.

Resignificando el 8M en La Guajira

Resignificar el 8M en La Guajira implica trascender la conmemoración simbólica y enfocar los esfuerzos en acciones concretas de empoderamiento económico de las mujeres y visibilización de las brechas que las afectan. Solo así se podrá avanzar hacia un futuro más igualitario.  Significa pasar de la conmemoración a la acción, de las palabras a los hechos. Implica construir una agenda feminista que ponga en el centro la vida y la seguridad de las mujeres guajiras, que reconozca sus realidades diversas y sus resistencias cotidianas.

En La Guajira, el Día Internacional de la Mujer no puede seguir siendo una fecha para celebraciones superficiales y discursos vacíos. Es hora de resignificar el 8M como un llamado urgente a la acción, a la lucha permanente por cerrar las profundas brechas de desigualdad que afectan a las mujeres guajiras. Mientras las autoridades se llenan la boca hablando de igualdad, la realidad es que las mujeres, especialmente las rurales, indígenas y migrantes, enfrentan barreras estructurales para acceder a recursos, servicios y oportunidades. ¿Hasta cuándo seguiremos tolerando esta injusticia?

Es momento de pasar de las palabras a los hechos. ONU Mujeres nos da una clave al instar a invertir en las mujeres como la mejor solución ante las crecientes crisis. En La Guajira, esto significa impulsar iniciativas concretas de empoderamiento económico, como el Laboratorio de Impulso al Empoderamiento Económico que busca vincular a más de 1000 mujeres en actividades productivas. Significa fortalecer los emprendimientos liderados por mujeres, brindándoles formación y acceso a tecnología. Significa visibilizar sin miedo las brechas de género que persisten en el departamento, para que nadie pueda seguir ignorándolas. Solo con acciones valientes y decididas podremos transformar el 8M en un verdadero catalizador de cambio hacia la igualdad real y efectiva de las mujeres guajiras.